¿Hay algo más bonito que ver las caritas de niños y niñas de 3 añitos, repletas de ilusión y nerviosismo a la vez? Así fue como estaban las caritas de mis niños-as de la clase naranja. Por primera vez irían de excursión con sus compañeros y sin sus familias ¡Ya empezamos a ser niños mayores!
Después de despedir a los papis y las mamis y darnos cuenta de que ellos estaban más nerviosos que sus pequeños-as, comenzamos nuestro caminito en el autobús.
Al llegar a la granja nos reciben los monitores y todo se convierte en una realidad y una de las mejores experiencias en sus cortar vidas:
En grupos de cactus y gallos se divide nuestra clase y comenzaron las actividades: visita a los aninales de la granja, al huerto, y al comedor, donde comenzaron desayunando, después irían a montar en burrito, plantarían una planta y terminarían realizando una bolsita de aroma...
Tengo la grandísima suerte de además de ser maestra del Centro, también soy mama de un pequeño de la clase azul. Vivir junto a mi pequeño esta experiencia ha sido un regalo para mi:
Todo lo que un niño vive y experimenta, se convierte en aprendizaje significativo, base para aprender...
Recuerdos a la burrita Margarita, que solamente tenía 3 días y ahi estuvo al lado de todos los peques...
Un recurso educativo con un gran valor social y didáctico.
ResponderEliminarImpagable esas caritas de felicidad.
que bien se lo pasaron, y con cuanta ilusion, pero sobre todo lo q aprenden, desde ahorrar para pagarse su excursion hasta lo que come un burrito, muy buena experiencia
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